Podemos encontrar en nuestra herboristería habitual estas bayas tibetanas que se parecen en la forma a la guindilla cayena pero que realmente son pequeñas cerezas desecadas procedentes del Tibet y usadas allí por la medicina tibetana desde tiempos remotos.
Son muchos los beneficios que se les atribuyen, en concreto ayudar a reforzar el sistema inmune, regular el apetito y el sueño, cuidar el hígado y los riñones, retrasar la pérdida de cabello y la aparición de canas y en general mejorar la salud y el bienestar. Por esto mismo se le apoda la “baya feliz”.
Parece ser que estas bayas tienen un altísimo nivel de antioxidantes y también de vitamina C, aminoácidos, oligoelementos, betacaroteno y polisacáridos.
En cuanto al sabor habrá personas y personas pero para nada son desagradables ni mucho menos.Podríamos decir que esta baya es pequeñita pero “matona”. Pero con estos productos exóticos y casi “mágicos” es mejor mantener la cabeza fría y utilizarlos como complemento dentro unos hábitos de vida sanos. Aunque nadie duda que sean un buen complemento.
A continuación, os dejo un link con 33 razones para tomar bayas de goji diariamente.http://www.nonispania.com/documentos/33_razones.pdf
Fuente: http://www.vitonica.com/